En Entre Ríos, el almacenamiento de los zapallos (Cucurbita moschata) se realiza habitualmente apilándolos en galpones, con lo cual quedan expuestos a pérdidas de peso por deshidratación, manchas y podredumbres. En esas condiciones (luego de la cosecha en marzo), los frutos de la variedad Paquito INTA mantienen su valor comercial hasta julio, mientras que los de la variedad Frontera INTA alcanzan agosto.

En este marco, el INTA Concordia estudió, sobre ambas variedades, la aplicación de dos tipos de recubrimientos céreos: cera al agua de polietileno y carnauba. Los mejores resultados se lograron con los frutos de la variedad Frontera INTA encerados con carnauba que, luego de 7 meses, presentaron muy buenas características comerciales.

Si se consideran las menores pérdidas por deshidratación y alteraciones, la posibilidad de aprovechar los mayores precios de septiembre y octubre, y la ventaja de mantener un flujo continuo de ventas, la nueva práctica resulta muy conveniente para los productores del cultivo.