Washington, DC
May 13, 2008
ARS News Service
Agricultural Research Service, USDA
By Jan
Suszkiw
Improved disease resistance
could be in store for tomorrow's sunflower hybrids, thanks to
plants that Agricultural
Research Service (ARS) scientists collected in Australia
last year and are now evaluating in greenhouse trials in Fargo,
N.D.
ARS plant pathologist
Tom Gulya and botanist
Gerald Seiler traveled to Australia in early 2007 in hopes
of identifying new genes that could be incorporated into
American sunflower hybrids for improved resistance to fungal
diseases including downy mildew, rust and Sclerotinia
stalk rot.
Gulya considers stalk rot
enough of an economic threat to the U.S. sunflower crop that
incorporating even partial resistance from the Aussie plants
would be worthwhile. He and Seiler, who are both in the ARS
Sunflower Research Unit at Fargo, made the trip with funding
from the ARS
Plant
Exchange Office. With the assistance of a team from the
Department of Primary Industries and Fisheries (DPIF) in
Queensland, Australia, Gulya and Seiler collected 59 populations
of the wild sunflower species Helianthus annuus and H.
debilis.
In the fall of 2007, they began
greenhouse trials to evaluate the plants' fungal disease
resistance, as well as to analyze their seed oil content and
fatty acid composition. A
University of British Columbia collaborator will compare the
plants' genetic profiles to those of American wild sunflowers.
This could reveal whether the Aussie sunflowers have undergone
significant genetic changes since arriving in the Land Down
Under more than 100 years ago from America.
Gulya and Seiler estimate their
sunflower expedition took them on a journey of more than 6,200
miles through Western Australia, South Australia, New South
Wales, Victoria and Queensland. On average, they and the DPIF
team gathered 6,000 sunflower seeds per collection. This
included plants from yards, hedgerows, municipal garbage dumps
and other sites.
Read more about the research in the May/June 2008 issue of
Agricultural Research magazine.
ARS is the
U.S.
Department of Agriculture's chief scientific research
agency.
Por
Jan
Suszkiw
13 de mayo 2008
Una resistencia mejorada a
enfermedades podría ser posible para los híbridos de girasol del
futuro, gracias a algunas plantas que los científicos del
Servicio de Investigación
Agrícola (ARS) colectaron en Australia el año pasado y ahora
están evaluando en pruebas de invernadero en Fargo, Dakota del
Norte.
Patólogo de plantas
Tom Gulya y botánico
Gerald Seiler, quienes trabajan en la
Unidad de Investigación de Girasol mantenida por el ARS en
Fargo, viajaron a Australia temprano en el 2007 con la esperanza
de identificar nuevos genes que podrían ser incorporados en los
híbridos de girasol estadounidense para mejorar resistencia a
las enfermedades fúngicas incluyendo el mildiú velloso, la roya
y la podredumbre de tallo por Sclerotinia.
Según Gulya, la podredumbre de
tallo representa una amenaza económica lo suficientemente grave
como para merecer la incorporación de por lo menos una
resistencia parcial en los girasoles estadounidenses. La
Oficina de Intercambio de Plantas mantenida por el ARS en
Fargo patrocinó el viaje de Gulya y Seiler a Australia. Con la
ayuda de un grupo del
Departamento de Sectores y Pesquerías Principales (DPIF por
sus siglas en inglés) en Queensland, Australia, Gulya y Seiler
colectaron 59 poblaciones de las especies silvestres de girasol
Helianthus annuus y H. debilis.
En el otoño del 2007, ellos
comenzaron pruebas de invernadero para evaluar la resistencia de
las plantas a las enfermedades fúngicas y para analizar sus
niveles de aceite y composición de ácidos grasos. Un colaborador
en la Universidad de Columbia
Británica comparará los perfiles genéticos de las plantas
con los de los girasoles silvestres americanos. Estas
comparaciones podrían revelar si los girasoles australianos han
pasado por cambios genéticos significantes desde que llegaron a
Australia de EE.UU. hace más de 100 años.
Gulya y Seiler estiman que
viajaron más de 6.200 millas por Australia Occidental, Australia
Meridional, Nuevo Gales del Sur, Victoria y Queensland. Por
termino medio, ellos y el grupo de DPIF colectaron 6.000
semillas de girasol por cada colección. Estas colecciones
incluyeron semillas de plantas de jardines, setos vivos,
vertederos municipales y otros sitios.
Lea más sobre la investigación en la revista 'Agricultural
Research' de mayo/junio 2008.
ARS es la agencia principal
de investigaciones científicas del
Departamento
de Agricultura de EE.UU. |